¿Cómo solicitar un crédito instantáneo?

En cualquier momento puede surgir un imprevisto y verse afectada nuestra economía personal. El pago de una factura, llegar a final de mes, pagar una multa… cualquier circunstancia inesperada puede hacer que necesitemos dinero de inmediato. En esos casos, una solución es solicitar un crédito instantáneo para poder disponer del dinero que necesitas en 15 minutos.

Pero, antes de solicitar cualquier tipo de crédito, es necesario decidir si realmente se necesita ese dinero y si es en ese momento determinado. Los créditos son una solución rápida y sencilla, pero se adquiere un compromiso y se ha de asumir que se está comprando el dinero. Los créditos instantáneos fueron creados para ser utilizados con responsabilidad y en momentos puntuales, no como una forma de financiación habitual.

Las empresas prestamistas que conceden este tipo de créditos tienen muy en cuenta el comportamiento financiero de sus clientes, en caso de detectar que hacen un uso irresponsable de sus créditos y préstamos, pueden denegar la concesión de nuevos créditos aunque el cliente haya pagado su deuda sin incidentes.

¿Cómo solicitar un crédito instantáneo?

El proceso de solicitud de un crédito instantáneo es muy sencillo y está al alcance de cualquiera, se puede hacer por teléfono, por Internet desde cualquier lugar o a través de aplicaciones para móviles. Es muy importante que, antes de decidirse por una empresa prestamista en concreto, se consulten varias de ellas a través de los comparadores de créditos rápidos para poder decidirse por la que ofrezca mejores condiciones para cada caso en concreto. Una vez nos hayamos decidido por una empresa prestamista u otra, deberemos seguir los siguientes pasos:

• Saber la cantidad que se va a solicitar. Es recomendable pedir solo la cantidad que realmente se necesita, ya que a mayor cantidad de dinero prestada mayores serán los intereses. Algunas empresas prestamistas conceden el primer crédito a un cliente nuevo sin cobrarle intereses; sin embargo, la cantidad prestada inicialmente por lo general es baja.
• Entrar en la página web de la empresa en el caso de solicitar un crédito instantáneo por Internet. En la página inicial de las empresas de capital privado se ofrece toda la información referente a sus créditos, entre ella la cantidad que se va a tener que devolver y el plazo de tiempo que dan para hacerlo. A través de una sencilla calculadora, se podrá saber con exactitud cuánto dinero se va a pagar dependiendo de los días que se elijan para devolver el dinero. El plazo de devolución de los créditos instantáneos suele ser muy corto para cantidades pequeñas, como máximo de un mes.
• Informarse de las condiciones del crédito. Si es posible devolverlo antes del plazo acordado y de ese modo pagar menos intereses o si es posible solicitar una prórroga en caso de no poder hacer frente a la deuda en el plazo de tiempo acordado.
• Informarse con qué bancos trabaja la empresa prestamista elegida. Si trabaja con la misma entidad bancaria en la que está la cuenta corriente que se va a presentar para recibir el dinero, podrá ser disfrutado en 10-15 minutos; de lo contrario, el dinero podría tardar en llegar entre 24 y 48 horas.
• No desanimarse si una empresa deniega el crédito. Cada una de ellas tiene sus condiciones y requisitos para acceder a sus créditos y préstamos, algunas son más flexibles que otras por lo que, si una ha denegado un crédito, es posible solicitarlo a otro prestamista.
• Ser consciente de las circunstancias reales personales. Los créditos rápidos son una solución atractiva. Saber que se puede disponer del dinero que se necesita en 15 minutos es realmente tentador. Sin embargo, es necesario tener la seguridad de que ese dinero se va a poder devolver en el plazo de tiempo acordado; si no es así, es mejor buscar otras soluciones. No devolver un crédito, aunque sea por un importe pequeño, puede traer consecuencias que harán que se deba pagar una cantidad de dinero mayor y, además, no se podrán solicitar otros créditos a otras empresas de capital privado ni a entidades bancarias.
• Elegir el crédito adecuado. Algunas empresas prestamistas tienen créditos específicos para jóvenes de 18 años. A través de ellos, se pueden financiar los estudios de manera puntual o cualquier otra necesidad. Por lo general, al hacer una solicitud de una cantidad pequeña de dinero no es necesario dar explicaciones del uso que se le va a dar, pero es necesario que cada persona utilice ese dinero con responsabilidad y únicamente en momentos en los que es realmente necesario.
• En caso de estar incluido en una lista de morosos, algunas empresas de capital privado aceptan clientes en esta situación. Pero será necesario saber sus condiciones, ya que algunas aceptan a clientes que hayan contraído una deuda que no supere los 500 euros y otras aceptan a clientes con deudas de hasta 2.500 euros. Sin embargo, casi ninguna aceptará a un cliente cuya deuda haya sido contraída con una entidad bancaria a través de cualquiera de sus productos o con otra empresa de capital privado.